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31 de Agosto de 2021 | 12:11
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El rol de la maquetación en tu sitio web

Tener todo listo es optimizar una página web es un proceso que toma bastante tiempo por la gran cantidad de factores a considerar. Sí, podrías publicarla en básicamente cualquier estado, pero esto no implica que vaya a estar optimizada o siquiera ser lo suficientemente buena como para cumplir con su misión.

Lo prioritario es haber trabajado el posicionamiento porque es la base del crecimiento del sitio. Necesitas verificar que la estrategia que elegiste sea la que vaya a funcionar para no perder tiempo en correcciones que demandarán demasiado trabajo y algunos meses para ver el resultado.

Su esencia es el contenido de calidad porque aumenta directamente el ranking en los buscadores al ser uno de los parámetros que más influyen. Es mejor revisar el contenido que tienes ahora al ser relativamente poco, en lugar de esperar a la primera auditoría. Sin embargo, no es lo único que importa.

Estructura, entradas y apariencia

Una web se compone de estos tres apartados globales que afectan directamente a todo el contenido de la página. Lo curioso es que la maquetación está relacionada con cada uno de estos apartados en mayor o menor medida, ¿pero cómo?

La estructura más básica de una página la determina la arquitectura del sitio, pero no para el usuario. Lo que ve el usuario en pantalla tiene que coincidir con la arquitectura que hayas elaborado para que la navegación sea coherente. Aquí es cuando debes escoger la posición de los elementos en pantalla para mejorar esta navegación.

Luego, el contenido en sí mismo debe ser útil, coherente y trabajar las palabras clave apropiadas, pero esto no servirá de nada si parece demasiado pesado de leer. Estructurar un artículo tiene que ver con el contenido en sí mismo, pero también con cómo se ve en pantalla. No es lo mismo colocar un bloque de 10.000 palabras seguidas que secciones en las que es fácil ubicarse visualmente.

La apariencia de la página tiene que ser atractiva, con colores apropiados al nicho y el público objetivo. Esto es un poco más complejo que simplemente hacer que se vea bonita, ya que la posición de cada elemento tiene que contribuir a crear una armonía. Funciona colocar los botones y el texto en sitios útiles, correctos y no tanto llenar todos los espacios que se vean vacíos.

La página tiene que ser creada para los clientes. Para atraerlos, hacerles la navegación fácil, orientarlos por donde quieran ir y darles una usabilidad apropiada. La maquetación es el primer paso para lograrlo.