Contextuales
18 de Enero de 2021 | 11:43
Industria

Instalar rejas en viviendas de Madrid

Vivir en una gran ciudad, como por ejemplo Madrid capital, no es tan peligroso como se suele decir o como se concibe por ejemplo en las películas, donde el conflicto genera todo tipo de problemas para los protagonistas de la historia. Sin embargo, si procedemos de otras comunidades autónomas, de ciudades mucho más pequeñas y tranquilas, o incluso de pueblos, nos puede generar ansiedad la posibilidad de vivir en urbes con el ambiente madrileño. Hay mucha gente, es el centro de la actividad cultural, profesional y política del país, y eso se nota y nos puede abrumar. Sin olvidarnos de que, en tiempos de pandemia, deseamos ante todo evitar aglomeraciones.

Esa ansiedad se traduce, en parte, en miedo hacia nuestra seguridad y la seguridad del sitio en el que vivamos. Si nos sentimos un tanto acobardados por la vida urbana en la capital, vivir por ejemplo en un barrio que de noche es solitario y en un piso de fácil acceso a través de las ventanas nos puede producir mucha intranquilidad. Sin embargo, para eso hay una solución, sobre todo si pretendemos vivir allí a largo plazo: la instalación de rejas en Madrid.

Aunque nuestra casa sea de alquiler, esta cuestión es importante hablarla con nuestro casero o nuestra casera para que nos dé permiso para instalarlas, si bien en este tipo de viviendas ya es raro que no haya ya montadas rejas en Madrid. Porque las ventajas en cuanto a seguridad y tranquilidad personal son muchas. Para empezar, son un sistema de seguridad eficiente y efectivo que cierra completamente la entrada a cualquier persona no invitada, ya que además están hechas con materiales duros y resistentes.

Por otro lado, también han sido diseñadas para que las personas que las tengan que instalar no se sientan encerradas ni incrementen sus problemas de ansiedad con un extra de claustrofobia. Lo mismo ocurre, por otro lado, con las terrazas de aluminio en Madrid: son un excelente sistema de seguridad, pero está pensado para que no resulte chocante visualmente. Lo importante es sentirnos a salvo y cómodos en nuestro piso al mismo tiempo.