Tratar la caída del cabello con productos naturales

La caída del cabello es una preocupación frecuente entre los adultos. Puede ser debido a una variedad de factores, como el envejecimiento, el estrés excesivo, una alimentación pobre, los medicamentos, o incluso, el exceso de exposición solar. Podría ser algo temporal, y corregirse con una buena atención.

Sin embargo, también puede ocurrir que se necesite un tratamiento con productos naturales para prevenir problemas a largo plazo. Si eres uno de los muchos que está luchando por este problema, hay algunos remedios naturales que puedes intentar, además de seguir un tratamiento para la caída del cabello.

Aceites naturales

Por cientos de años, la medicina tradicional ha usado hierbas y aceites para mejorar la salud del cabello. Esto incluye el aceite de coco, de oliva y de ricino. Se aplican mediante masajes en el cuero cabelludo para estimular las glándulas sebáceas, mejorar la circulación y prooporcionar a los folículos la luz que necesitan para desarrollarse. La aplicación regular ayudará a preservar la humedad y evitar que el cabello se rompa, se debilite o se caiga.

También puedes mezclar aceite de coco con canela y romero para hacer una loción que estimule el crecimiento del cabello. Esta mezcla hará que el cabello sea más suave, fuerte y menos propenso a caerse. Se aplica directamente en el cuero cabelludo y se deja actuar durante una hora antes de quitarla, para después, lavar el cabello con un champú natural.

Una buena dieta

Otra forma de prevenir y controlar la caída del cabello es llevar una dieta equilibrada que contenga alimentos ricos en vitamina B, como las verduras de hojas verdes, los huevos, el hígado y los mariscos. Estas vitaminas ayudan a mantener la salud del cuero cabelludo y a estimular el crecimiento del cabello.

Ciertas frutas y verduras, como el jengibre, el limón, el perejil y la zanahoria, también son excelentes para estimular el crecimiento. Son ricas en vitamina C, que estimula la producción de colágeno y mejora la circulación de la sangre en el cuero cabelludo.

Tomar suficiente agua es una de las bases para mantener el cabello saludable. Unos dos litros diarios, junto con frutas y verduras abundantes en agua, será suficiente. Es una de las mejores formas de evitar que se quiebre y caiga más de lo normal.

También hay que proteger el cabello del sol. Existen protectores solares para cuidar tu pelo de la acción solar,  aunque tampoco estaría de más utilizar una gorra, o un sombrero para incrementar la protección.